Se suele hablar de la crisis de embarazo como si fuera cosa solo de mujeres. No obstante…
Es evidente que no hay embarazo sin la intervención de un hombre, aunque sea -en algún caso excepcional- por donación de esperma. Por lo tanto, donde hay una mujer que ha concebido, también hay, o ha habido, un hombre. Normalmente en una pareja el hombre se entera del embarazo y por lo tanto, quiera o no, se le llega la conciencia de que ha llegado a ser padre. De igual manera que una mujer no deja de haber sido madre, aunque por pocas semanas, el padre tendrá siempre esta conciencia, aunque de otra manera al no haber llevado la criatura.
Hay toda clase de reacciones a la noticia de un embarazo no esperado. Algunos hombres pueden ser el tipo duro que solo le interesa su placer personal, y animan a la mujer a abortar, a deshacerse de la inconveniencia. Pero muchos se enternecen con la noticia del embarazo y un instinto paterno se les despierta. De todas formas, los pocos estudios profesionales que se han hecho demuestran que el instinto dominante es el de proteger a su pareja, con lo cual muchos hombres reprimen sus propias emociones para dar apoyo a la pareja en cualquier decisión que tome, sea para seguir adelante o abortar.
Desgraciadamente un aborto no termina con la crisis para el hombre, como tampoco para la mujer. Frecuentemente la relación de pareja se rompe con la noticia o poco después.
Después de un aborto, se ha demostrado que los hombres sufren el duelo de forma diferente a las mujeres. Las mujeres tienden a sufrir fuertemente durante bastante tiempo, mientras que los hombres tienden a desviar su energía emocional hacia ser más activos o intentan reponer lo perdido de alguna manera.
Un hombre también suele intelectualizar su duelo, en lugar de permitir que sus emociones le impacten de lleno. Los hombres pueden sentirse muy solos, malentendidos, sin apoyo, y sin que nadie se fije en ellos, mientras sientan una presión para ‘ser fuertes’, como hombres. Se desvían de distintas maneras, pero generalmente la distracción no consigue esconder el secreto. Suele ser necesario el apoyo emocional e incluso espiritual para que el hombre llegue a superar la crisis.
Si es tu caso que estás en una crisis actual, busca ayuda antes de que sea tarde. Si ya la has pasado, aunque hace mucho tiempo, todavía hay esperanza. No dudes en contactar con nosotros o con otro servicio de consejería de confianza.
No se ha podido decir todo en este breve blog. La Doctora Catherine T Coyle, una psicóloga y enfermera Católica de los EEUU, ha escrito un librito sobre este tema, que se puede bajar como PDF aquí: